Tratamiento facial personalizado con Dermalogica en Chi Spa

Hace creo que ya un par de meses (el tiempo, vuela) me invitaron a realizarme un tratamiento facial en Chi Spa de la mano de Dermalogica. Y hoy, quiero contaros mi experiencia.

Chi Spa es un centro dedicado al cuidado, estética y bienestar de la piel y el cabello, situado en la zona centro de Madrid. Decorado exquisitamente, cuenta con un equipo de grandes profesionales en constante formación, que ofrecen los mejores y más novedosos protocolos de belleza. Su carta está repleta de rituales faciales y corporales adecuados para todo tipo de necesidades, masajes, servicios de peluquería, depilación, maquillaje, manicura y pedicura, cuidado de pestañas…

Uno de esos protocolos es el tratamiento facial personalizado con productos Dermalogica, que cuenta con el sistema "Face Mapping Skin Analysis", una técnica pionera en el análisis de la piel cuyo objetivo es descubrir las necesidades reales de tu piel antes de empezar un tratamiento.

Uniendo las últimas técnicas con los conocimientos ancestrales del diagnóstico chino, esta metodología divide nuestro rostro en 14 zonas para analizar de forma objetiva las necesidades específicas de la piel. Gracias al Face Mapping Skin Analysis descubrimos cuál es nuestro tipo de piel, y en qué estado se encuentra en el día de realizarse el tratamiento: deshidratación, sensibilidad, falta de luminosidad, tono desigual de la piel… Esta información será determinante para crear un plan personalizado de cuidado facial para ese día.

Aunque cada tratamiento es personalizado, hay una serie de pautas que siempre se siguen:

1. Diagnóstico: 

Se procede a realizar un análisis facial exhaustivo del rostro para evaluar las necesidades de la piel en el momento de realizar el protocolo (estas van variando dependiendo de una serie de factores como pueden ser la alimentación, la hidratación, los niveles de estrés, la contaminación a la que estamos expuestos, la estación del año, los cambios hormonales…).

2. Limpieza: 

Una buena limpieza es la base para conseguir una piel sana y bonita. Así, se comienza utilizando PreCleanse Balm, una base prelimpiadora muy suave con la que se retiran los restos de grasa, suciedad y maquillaje y se prepara la piel para una limpieza más profunda. Después se pasa a utilizar otro producto más específico para el tipo de piel sobre la que se esté trabajando. Para completar este proceso, Dermalogica colabora con la firma de tecnología portátil bio therapeutic y utiliza BT Sonic, un innovador cepillo de silicona con el que se consigue una higiene facial más profunda. Su ergonomía y su pequeño tamaño permiten llegar a zonas de difícil acceso, como las aletas de la nariz.

3. Exfoliar: 

Una vez que la piel está limpia de impurezas, llega el momento de retirar las células muertas, así como aquellas impurezas más resistentes que puedan estar taponando nuestros poros. Es aquí donde entra en juego la exfoliación, otro paso fundamental en las rutinas de belleza de Dermalogica. Daily Superfoliant y Daily Microfoliant son dos cosméticos ideales para dejar el cutis perfecto tanto en cabina como en casa.

Dermalogica completa esta fase con BT Micro Slim, también de bio therapeutic, un aparato que emite microcorrientes inferiores a 500 microamperios, que exfolia la piel de forma cómoda y no invasiva. Gracias a su eficacia, los principios activos penetran mejor que con un masaje manual.

5. Hidratar: 

Llega el momento de la hidratación, y para ello la profesional escoge los cosméticos más adecuados a las necesidades de nuestro rostro, contorno de ojos, cuello y escote. Además, los hace penetrar con un delicioso masaje que, junto con los aromas botánicos de las fórmulas de Dermalógica, hace que nos sumerjamos en un estado de auténtica relajación. Para mí fue uno de los momentos más gustosos del tratamiento.

6. Proteger:

Una vez terminados todos los anteriores pasos, y con el fin de poder salir a la calle sin problemas, se aplica un cosmético con protección solar para evitar que nuestra piel pueda sufrir daños.

El protocolo dura entre 60 y 70 minutos y el precio recomendado es de 70 €. Un protocolo que incluye, además de todo el proceso de limpieza y cuidado de la piel, un agradable masaje en el momento de la hidratación que, al menos en mi caso, incluía masajear la zona de los hombros y parte alta de la espalda y escote. ¡Una delicia! Del tratamiento sales como en una nube, con una sonrisa tonta y el rostro radiante. ¡Totalmente recomendado!